A Luis Manuel Pérez de Acha no le hace mella que le digan loco, protagónico o mediático. Siempre en el ojo del huracán, este polémico abogado sinaloense se ha convertido en un referente en las luchas de la sociedad civil.
Desde el logro de las candidaturas independientes que son hoy una realidad hasta un amparo ganado ante la Corte, presentado a través de la asociación civil Mexicanos Primero, con la cual se sienta un precedente histórico para sancionar los actos de corrupción de los servidores públicos.
No son sus únicas banderas. Actualmente espera una nueva resolución de la Corte, que ordene la apertura de declaraciones de impuestos de la Primera Dama, Angélica Rivera, por una “evidente contradicción” de ésta a raíz de la adquisición de la “casa blanca” a Grupo Higa, contratista beneficiado por el Presidente Enrique Peña Nieto, durante su paso como Gobernador del Estado de México, y luego, desde Los Pinos.
¿Has recibido alguna represalia del poder, por meterte en este tipo de asuntos?
No, ninguno. Lo que sí puedo afirmar es que por diversos lados me llegan invitaciones “amables”, amables enfatizo, de que abandone el asunto, eso sí.
¿Cómo te dicen?
Me dicen “no tiene caso”, “a dónde vas con este asunto”, “qué quieres lograr”, “es puro personal, piensa en tu familia”, oye “el desprestigio de México”, etcétera.
Pérez de Acha sostiene que si no fuera por el respaldo de un grupo de abogados, comprometidos con estos temas, él no tuviera el tiempo ni la energía, ni el dinero, para litigar temas trascendentales para consolidar la democratización del País.
¿Usted cobra por esos amparos que interpone?
No nada, lo definí como parte de mi aportación social.
No todos los abogados pagan esa cuota social…
Quizá sea porque no traigan el perfil, no tengan la esperanza de que se pueda hacer, es un perfil litigioso el que se requiere para esto. Ciudadanos activos
El 11 de marzo, por unanimidad, la Corte resolvió un juicio de amparo de Mexicanos Primero, con el cual se exigía a la Auditoría Superior de la Federación ejercitar sanciones y denuncias contra funcionarios educativos y líderes magisteriales por utilizar ilegalmente fondos destinados a la educación.
Detrás del equipo jurídico estuvo el sinaloense. Con este fallo, se sentó un precedente histórico.
“Por un lado”, explica Pérez de Acha, “ya los ciudadanos podemos pasar de una actitud pasiva a una actitud activa en la defensa de derechos humanos colectivos como la educación, la salud, la seguridad pública, el medio ambiente, siempre y cuando tengamos una justificación para hacerlo, que es la condición que estableció la Suprema Corte. Por ejemplo en el caso de Mexicanos Primero el objeto social marca que su finalidad es defender el derecho de los niños a una educación digna, por eso se le reconoció el interés legítimo para promover este amparo, eso por un lado, y por el otro lado se nos empodera a los ciudadanos para luchar contra la corrupción, en lo que Mexicanos Primero estuvo involucrado es en la corrupción en el gasto educativo, eso es lo más importante, ya no vamos a seguir teniendo como única alternativa quejarnos de la corrupción, sino actuar en contra de ella, eso lo dijo la Suprema Corte de Justicia de la Nación”.
Este triunfo jurídico estuvo precedido de dos experiencias previas, que no fueron exitosas, aunque sí dejaron aprendizaje.
La primera, el amparo conocido como “Yo contribuyente”, con el que se buscaba frenar la condonación que se dio a estados y municipios en el pago del Impuesto Sobre la Renta, que éstos retenían a los trabajadores, recurso que no fue entregado al SAT.
Un segundo litigio se presentó a través de la organización civil Causa en Común, para reclamar también la corrupción en que incurrían estados y municipios en el manejo de dinero federal destinado al combate a la seguridad pública.
“Esos dos amparos los perdimos, pero aprendimos mucho”, cuenta el jurista.
Para el jueves 26 de marzo habrá una nueva audiencia constitucional, que sin duda, levantará polvaredas.
Ese día Pérez de Acha y los abogados que le acompañan ofrecerán pruebas para demostrar las mentiras en que incurrió la también actriz, ante la adquisición de una fastuosa residencia a un constructor beneficiado con contratos gubernamentales.
“Yo creo que en unos tres meses más tendremos ya la sentencia del Juez de Distrito, confiamos en que el Juez obligará al SAT a que nos dé la información, que nos confirme si la información que proporcionó la señora es falsa o verdadera”.
“Estamos súper optimistas (de un fallo favorable), porque es demasiada evidente la contradicción en que ella incurrió, de lo que manifestó públicamente, de lo que subió como declaración de impuestos a su página de Internet y lo que aparece en el Registro Público de la Propiedad, es una contradicción completa”, concluye.
Abre brecha
Pérez de Acha cursó hasta la preparatoria en escuelas de Sinaloa. Luego de concluir la prepa en el Instituto Chapultepec, decidió estudiar Economía en el Distrito Federal. Pero su padre le vio más “madera” para abogado. Así fue como ingresó a la Escuela Libre de Derecho. En su plan estaba volver a Sinaloa, pero en el camino le surgieron oportunidades laborales y de estudios, entre éstos un Doctorado en la UNAM. Se casó con otra culichi, hija del finado ex Procurador Jorge Chávez Castro. Una de sus hijas, Gisela, es hoy una destacada activista social en el Distrito Federal, integrante de un movimiento femenil internacional, que protesta con desnudos, para exigir el respeto a los derechos humanos. “De tal palo tal astilla”, comenta el abogado, quien se dedica a encauzar la inconformidad social a través del litigio.
¿Qué hay detrás de Luis Manuel Pérez de Acha, por qué lo hace, qué le mueve?
Dos cosas. Primero una frustración muy grande que me nace desde que pago impuestos y que termina cuando veo cómo lo están despilfarrando, cómo no rinden cuentas y cómo se lo están robando; pago impuestos y veo cómo termina esto, a cualquiera nos duele, tan duele que un tema recurrente en reuniones sociales, en pláticas de sobremesa es la queja contra la corrupción. Esa parte está ahí.
La otra es, yo no puedo hacer una aportación distinta de lo que corresponde a mi especialidad. Yo soy litigante, presento amparos y de ahí trabajo en eso. Como estoy en esa rama, en esa lucha, lo único que hago es utilizar mis herramientas, y a eso se centra todo, es una lucha institucional, nadie me puede acusar de que estoy tomando las calles, de que estoy incendiando las puertas de Palacio Nacional y ahí la gran valía es una protesta institucional si lo queremos ver así, pues triunfamos, lo que esperaría es que otras iniciativas ciudadanas, otras ONG, otros colectivos de ciudadanos hicieran lo mismo, la lucha está, la brecha se abrió, que lleguen los relevos a continuar estas batallas.
Candidato, ¡qué güeva!
En el marco de la sucesión por la Gubernatura en 2010, Pérez de Acha se presentó ante el Consejo Estatal Electoral para registrarse como el primer candidato independiente al Gobierno de Sinaloa. Fue la comidilla política, pues legalmente era imposible su registro.
Cuando te registraste como candidato independiente a la Gubernatura dijeron que estabas loco, que eras muy protagónico…
Primero ya estoy acostumbrado a que me digan loco. Ya estoy acostumbrado a que me digan protagónico, entiendo por qué lo dicen, pero a mí lo que me parece que lo que no se capta bien, que cada paso que doy en litigio tiene un plan estratégico de mediano plazo.
En 2010 yo estaba pensando en una candidatura independiente a la Presidencia de la República, no que fuera yo, ni que fuera Manuel Clouthier, pero hablar de alguien que tuviera un perfil, por eso lo hice, porque yo tenía que tomar la experiencia de Jorge G. Castañeda (primero que buscó competir por la Presidencia), tenía que ver cuál era el aprendizaje, cuál era la vía a seguir explorando; estos caminos se exploran y se aprenden, el Yo Contribuyente también fue una locura, también fue un protagonismo, pero hoy que vemos el resultado aplaudimos, bueno, hoy que hay candidatos independientes con una reforma constitucional no estamos satisfechos. Yo creo que es parte de un proceso, ahorita estamos pensando en Angélica Rivera, es otra locura protagonista, otras dos, tres acciones que voy a emprender más, y quizá también ya estemos pensando en 2018, ¿por qué no?, con candidatos independientes o a ver qué se nos ocurre. No podemos quedarnos con los brazos cruzados. Esa es la aportación.
También estuviste cerca de Manuel Clouthier Carrillo (su cuñado) cuando él decidió iniciar la lucha por las candidaturas independientes en 2012…
Sí, fue un trabajo conjunto que hicimos, se logró mucho, se detonó gracias a la lucha de Manuel, él fue quien encabezó y coordinó la reforma constitucional. Fue un papel protagónico el de él, ahora todos incluyendo él, hay varios candidatos independientes, pero se debe a una reforma constitucional que él impulsó, a una sentencia que si bien perdimos, dos magistrados nos dieron la razón, fundamental, hay que seguir trabajando en ese derrotero, el camino de los candidatos independientes es duro, pero hay que seguir buscando el reto.
¿Te ves compitiendo por algún cargo de elección popular por la vía independiente?
Jamás, jamás. Aquello fue con una finalidad jurídica, nada más. Se nos escapó un tanto de la mano la parte mediática, fue lo que sucedió. No lo previmos, no lo sabía y ya, pero jamás, eh.
¿No te ves en una curul, en una alcaldía, en alguna gubernatura? No, ¡qué güeva!
Lo suyo, enfatiza, es el litigio estratégico para generar transformaciones jurídicas, políticas, sociales. Y aún hay Pérez de Acha para rato.
“¿Qué hay detrás de mí? Primero una frustración muy grande que me nace desde que pago impuestos y que termina cuando veo cómo lo están despilfarrando, cómo no rinden cuentas y cómo se lo están robando”.
“Ya estoy acostumbrado a que me digan loco. Ya estoy acostumbrado a que me digan protagónico, entiendo por qué lo dicen, pero a mí lo que me parece que lo que no se capta bien, que cada paso que doy en litigio tiene un plan estratégico de mediano plazo”.
“Con el fallo de la Corte por el amparo de Mexicanos Primero ya los ciudadanos podemos pasar de una actitud pasiva a una actitud activa en la defensa de derechos humanos colectivos como la educación, la salud, la seguridad pública, el medio ambiente”.
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