La próxima presidenta electa podría enfrentarse a la urgencia de una nueva reforma fiscal debido al nivel de deuda que tiene el país
En medio de la presentación de iniciativas de reformas y en vísperas de elecciones, el tema presupuestal sigue dando de qué hablar, y es que el manejo de los ingresos del país que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ha hecho, han atraído la atención de especialistas que aseguran, la próxima administración tendrá que ajustarse a una nueva reforma fiscal.
Según el análisis “Hacienda en la mira al cuarto trimestre de 2023”, publicado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) el pasado 1 de febrero de 2024, el cual consideró más de 50 indicadores de ingresos, gasto y deuda del sector público federal, con información de la SHCP, en 2023, el déficit presupuestario del sector público representó el 3.4% del PIB, mientras el déficit primario fue equivalente al 0.1% del PIB.
Asimismo, el Instituto expuso que al cierre de 2023, el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) fueron de 14.87 billones de pesos, saldo 9.6% mayor respecto a diciembre de 2018, por lo que la deuda pública ascendió a 1.05 billones de pesos, 21.5% respecto a 2022 y que representó el 12.9% del gasto total del sector público.
Deuda pública urgirá una reforma fiscal en México
La información de la SHCP analizada por el IMCO informó también que en 2023, el sector público registró un gasto neto total de 8.12 billones de pesos, 1.8% más, respecto a lo reportado en 2022: y el gasto federalizado fue de $18,210 por habitante; en tanto las entidades con más recursos federales per cápita fueron Campeche, Colima, Tabasco, Baja California Sur y Nayarit.
Sobre este punto, el abogado experto en Derecho Constitucional, Fiscal y Administrativo, socio fundador y director del despacho Pérez de Acha e Ibarra de Rueda, Luis Pérez de Acha, resaltó que al cierre de 2023, se obtuvo un déficit primario de ingresos de al menos 1.1 billones de pesos, que sumados al gasto federal, “tuvo que ser financiado con deuda pública”.
El experto destacó que se debe considerar que dicha cantidad, “sumada a los 2 billones de pesos que se pretenden contratar como deuda para el 2024, da un total de 3.1 billones”, lo que equivale al 10% del PIB del país; y tomando en cuenta lo presupuestado para este año, “quien llegue a la presidencia tendrá un reto muy grande con las finanzas públicas”.
Pérez de Acha aseguró que quien llegue a la presidencia, tendrá “que afrontar la necesidad de efectuar una reforma hacendaria de gran calado que incluya una reforma fiscal importante”, ya que la deuda total del sector público mexicano es de 15 billones de pesos, de lo cual, “90% corresponde a endeudamiento interno (Cetes y otros instrumentos de igual tipo)”.
Recaudación tributaria, “por abajo de lo esperado”
El abogado especialista en Derecho Constitucional añadió que otro aspecto que el próximo gobierno debe atender es el tema de la recaudación tributaria, la cual puntualizó, en 2023 “estuvo muy por abajo de lo esperado o de lo programado en la Ley de Ingresos de 2023”, alcanzando 4.52 billones de pesos, que representaron el 64.2% de los ingresos totales del sector público.
- Impuesto sobre la renta (ISR): Pérez de Acha mencionó que el total recaudado respecto de la cantidad presupuestada en la Ley de Ingresos fue menor en un 4.6% (122 mil millones de pesos).
- Impuesto al valor agregado (IVA): El experto señaló que lo recaudado y lo programado en la Ley de Ingresos “fue de menos 121 mil millones de pesos, un 8%”.
- Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS): Si bien, el IMCO señaló que este impuesto tuvo un incremento real de 258.9%, gracias a gasolinas y diésel, el experto del despacho Pérez de Acha e Ibarra de Rueda aseguró que el saldo “también fue negativo en 64 mil millones de pesos, respecto del programado de la Ley de Ingresos de la Federación equivalente a un 12.5%.
Aunque el Instituto Mexicano para la Competitividad compartió que el gasto en desarrollo social representa el 65.3% del gasto programable total, rubros como la educación perdieron peso, pasando a 15.7%, en tanto el gasto en pensiones fue de 1.30 billones de pesos y representó 16.0% del gasto total.
Tomando en cuenta lo anterior, Luis Pérez de Acha enfatizó en que hay una gran posibilidad de que el próximo gobierno atienda una reforma hacendaria que se enfoque en la situación fiscal del país.