Las finanzas públicas débiles ponen al país en situación de debilidad y se pueden presentar crisis eventuales que serían muy delicadas, advierte el doctor Luis Pérez de Acha, especialista en Derecho constitucional, fiscal y administrativo.
Al hablar del último informe sobre las finanzas públicas de México al cierre de 2023, que presentó la Secretaría de Hacienda, Pérez de Acha dice que el informe subraya que la situación de las finanzas “está muy complicada”.
Déficit en la deuda pública de México
“¿Por qué digo que son inquietantes algunos datos? Primero, porque en 2023 se reflejó, ya confirmado por Hacienda, un déficit de 1.1 billones de pesos, que tuvo que cubrirse con deuda pública”, indica.
“A eso hay que agregarle los 2 billones de pesos que están previstos como deuda para este año”, añade, en entrevista con Diario de Yucatán.
“Estamos hablando de que en solo dos años la contratación de deuda pública será de 3.1 billones de pesos, lo cual equivale al 10% del Producto Interno Bruto. Es mucho dinero”.
El gobierno gasta mucho dinero y no recauda lo suficiente
Al respecto, el especialista señala que hay dos situaciones: Por un lado, se está gastando mucho dinero, y, por otro, no se está recaudando lo suficiente”.
“Eso implica que no se está obteniendo vía recaudación para cubrir todos los pasivos que afronte el gobierno federal, como pensiones, transferencias federales a las entidades y municipios”
“Y también (implica) los grandes boquetes que se tienen de Pemex, CFE… Realmente, como lo he repetido varias veces: la cobija es pequeña”.
Pérez de Acha subraya, además, que la recaudación federal se quedó muy por debajo de lo esperado.
La recaudación federal en 2023, debajo de lo proyectado
“Si bien fue superior a la de 2022, sí se quedó debajo de lo proyectado, lo cual explica la deficiencia que se tuvo en el déficit”.
“Por ejemplo, el Impuesto Sobre la Renta se quedó $122,000 millones de pesos abajo; el IVA, en $121,000 millones de pesos abajo, y el IEPS, 64,000 millones de pesos abajo”, continúa.
“En esos tres conceptos andamos en los 300,000 millones de pesos debajo de lo esperado”.
Pérez de Acha destaca que esa situación pone de frente o reactiva lo que tendría que ser la discusión en las campañas electorales para quien vaya a ocupar la Presidencia de la República y el Congreso de la Unión:
Posibilidad de una reforma fiscal
“Hay que hablar de una reforma hacendaria, de una reforma fiscal”.
El especialista recalca que el gasto público está muy grave:
“Eso lo vemos en términos muy caseros, que mientras más gastamos más le sacamos a la tarjeta de crédito, y si nuestros ingresos no crecen al ritmo que estamos gastando nuestras deudas aumentan. En el caso del país es lo que está sucediendo”.
Pérez de Acha señala que grandes obras del presidente Andrés Manuel López Obrador, como Dos Bocas o el corredor transístmico, más allá de si son rentables, han implicado una inversión muy grande y demandado muchos recursos.
“La austeridad republicana sí se reflejó en sueldos, salarios y reportes de programas… pero no quiere decir que no se dejó de gastar en otros lados”, concluye.
